Gobierno de Chile

Instituto Psiquiátrico Dr. José Horwitz Barak transforma su modelo de internación y da enfoque de reintegración social


Tras 170 años de historia, el Instituto Psiquiátrico Dr. José Horwitz Barak ha iniciado una importante transformación en su modelo de atención hacia la salud mental. El antiguo enfoque asilar ha quedado atrás y está avanzando hacia una nueva forma de brindar cuidado, esto debido al cambio de paradigma dictado por la Ley de Salud Mental 21.331, donde se prioriza la reintegración social de pacientes que habitualmente son internados por extensos periodos, relevando su derecho a vivir de manera independiente y a ser incluidos en la comunidad. A comienzos de este mes se concretó el cierre de la unidad de Larga Estadía Damas, egresando a sus usuarias, siendo éstas derivadas a residencias protegidas, a los hogares de sus propias familias y, las que tienen casos más complejos, a una clínica en convenio.

“Nuestro actual modelo no implica reducir el número de camas, sino más bien llevar a cabo una reubicación de los pacientes fuera de estos hospitales. La ley de Salud Mental es fundamental en este proceso, ya que pone especial énfasis en articular los servicios de salud, con el objetivo de evitar que los pacientes permanezcan en entornos cerrados una vez que han sido compensados”, explicó el Dr. Juan Maass, director (s) del Servicio de Salud Metropolitano Norte.

Al respecto, la Dra. Lilian San Román, directora (s) del Instituto Psiquiátrico Dr. José Horwitz Barak, indicó que “este es un hospital con una mirada de futuro, de estabilización de la patología psiquiátrica aguda y la reinserción de los pacientes, tanto en el seno de la comunidad, como en dispositivos que tengan las capacidades para contenerlos al interior de la comunidad. Se cierra Larga Estadía Damas y cerramos parte de la historia de nuestro hospital”.

El psiquiatra jefe de Larga Estadía Damas, Dr. Ennio Vivaldi, detalló que este proceso de traslado tomó un año y medio en ser desarrollado, gracias a un trabajo interdisciplinario pudieron evaluar las mejores posibilidades para reintegrar a estas pacientes. Por su parte, Cesar Hidalgo, asistente social de dicha unidad, señaló que el éxito de esta tarea se debió a la incorporación de las usuarias, como también, por el trabajo de exponenciación con las redes. “Hicimos un trabajo humanizado en toda esta etapa de cambio de lugar a los distintos espacios donde se fueron, con el fin de poder potenciar su tejido social”, concluyó el profesional.

“Hemos recibido en algunos de nuestros dispositivos residenciales a cinco usuarias, que gracias a una labor en conjunto y bien coordinada, actualmente residen en casas que están emplazadas en la comunidad y donde se promueve una rehabilitación psicosocial integral con participación de las personas en sus comunidades, en sus territorios. Ahí las usuarias que han podido egresar participan y conviven con otras personas que han vivido el mismo proceso. Hasta la fecha han estado muy contentas de poder ir retomando una vida afuera, de poder reconocer los espacios”, agregó el Dr. Cristián Mena, jefe del Centro de Responsabilidad Red de Servicios de Rehabilitación Psicosocial y referente técnico de hogares y residencias protegidas del Instituto Psiquiátrico.

El Dr. Juan Maass explicó que este cambio no solo representa un progreso para el Instituto, sino también para la comunidad en general, señalando además que se está trabajando en el análisis de proyectos que puedan ser desarrollados en los espacios que dejaron de ser ocupados por la unidad de Larga Estadía Damas, asegurando que son sumamente interesantes y buscan atender otras necesidades de la población.

En relación a la Larga Estadía Varones, unidad que sigue en funcionamiento con más de 20 pacientes, hay un plan ya aprobado en el Ministerio de Salud para levantar dos residencias protegidas para comenzar una labor de derivación de estos pacientes, y así concretar en su totalidad el nuevo modelo de atención.